SE TUVO UN DECREMENTO MUY IMPORTANTE EN SU CAUCE DEL RÍO GALLINAS
AQUISMÓN, SLP.- Otra vez, por causa del estiaje, la Cascada de Tamul, se queda sin agua y desaparece por completo, debido al bajo nivel que presenta en esta temporada el “Río Gallinas”, situación que ha puesto en alerta a los prestadores de servicios turísticos, quienes aún esperan importante afluencia de turistas durante los próximos fines de semana tal y como ha ocurrido en los últimos años.
A partir de este fin de semana, los lancheros que brindan el servicio en el lugar para hace el recorrido desde “La Morena”, hasta las cascadas, reportaron a la Delegación de Turismo en la Huasteca, que la cortina de agua en Tamuín había desaparecido, lo cual se notificó a la Secretaría de Turismo y Conagua, para que se tomaran las acciones correspondientes respecto al caso.
En el comunicado oficial se puede leer: “Esta mañana se ha recibido el reporte por parte del C. Carlos López, Secretario del Comité de Lancheros Aventureros del Río Tampaón de Tanchachin, Aquismón, S. L. P. que la Cascada de Tamul tuvo un decremento muy importante en su cauce del Río Gallinas, por lo que ya no se cuenta con la cortina de agua que forma la Cascada y se menciona que esto es causa de la sequía que ha prevalecido por meses, por lo cual al iniciar la temporadas de lluvias, se normalizará la cauda de la cascada”.
Se hizo mención que con base en las actas de la Décima Sexta Reunión y de la reunión de seguimiento del Comité del Cuenca del Río Gallinas, celebradas los pasados 19 de febrero de 2019 y el 27 de marzo de 2019, en la Presidencia Municipal de Tamasopo, S. L. P. en apoyo para que durante la temporada vacacional de Semana Santa y Pascua 2019 se incrementara el volumen de agua en el Río Gallinas y se apreciara la Cascada de Tamul, se celebraron y respetaron los acuerdos segundo y primero respectivamente, consistiendo en: la suspensión total de riego para este sistema fue del 7 al 21 de abril de este año.
Apenas en el mes de marzo, a través de la Comisión Estatal del Agua (CEA), se informó sobre una investigación que se realizaba por parte de la dependencia en conjunto con la Universidad Autónoma, ya que se había detectado que parte del afluente se estaba «fugando» por un socavón, mismo que no había podido ser ubicado pero se presumía su existencia, ya que mediante registros de niveles, se encontraron variaciones importantes justo en la zona cercana a la cascada.
Con información de José Martínez/El Sol de San Luis.
