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“NO SOY NI LOCO, NI RARO”, UN NIÑO CON ASPERGER NOS EXPLICA EN QUÉ CONSISTE ESTE SÍNDROME.

El síndrome de Asperger es un Trastorno del Espectro Autista (TEA) que no es muy conocido y que aún muchas personas no lo comprenden. Algunos niños incluso pueden sufrir rechazo o discriminación debido a que su relación con las personas es complicada.

Para que podamos entenderlo mejor, Federico, un niño que lo padece, nos explica de una manera muy clara cómo percibe él las cosas al tener Asperger y nos deja claro que es “un niño como cualquier otro”.

Federico es un niño colombiano de 8 años que padece síndrome de Asperger. Con el apoyo de su madre, Andrea Villegas, ayuda a crear conciencia de este síndrome a través de su página de Facebook “Soy diferente, soy como tú”, y en la que comparte fragmentos de su vida, con el objetivo de que otras personas comprenden de mejor manera lo que es el Asperger.

En entrevista para Verne, su madre explica que la idea de la página surge debido a que Federico se sentía incomprendido por sus compañeros de la escuela, así que ella le ayudó a crear un espacio en el que pudiera explicar lo que sentía y pudiera hablar de este síndrome que es poco conocido.

No son niños enfermos, sólo distintos: Día Internacional del Síndrome de Asperger.

Recientemente un vídeo en el que él explica cómo es vivir con Asperger se viralizó, gracias a que otra madre de un niño con el mismo síndrome lo publicó, llegando a ser reproducido más de 7.7 millones de veces, y el cual mucha gente aplaude por poner ejemplos muy claros de lo que siente él al padecerlo, y que sin duda ayudan a que las demás personas podamos entenderlo mejor.

En el vídeo, Federico comienza presentándose y aclarándonos algo: el Asperger no es una enfermedad, así que no hay que buscarle cura. Él explica que este síndrome es una condición, que es parte de él y así seguirá siendo toda su vida.

Para que el mismo Federico pudiera entender cuál es a diferencia entre él y los otros niños, su madre tomó como ejemplo los famosos LEGO y le explicó que si suponemos que el cerebro está hecho de piezas de LEGO, la diferencia entre los neurotípicos (quienes no manifiestan comportamiento autista u otros comportamientos neurológicos atípicos) y quienes padecen Asperger, sería que los primeros serían armados con un manual de instrucciones y los otros no.

“No soy ni loco, ni freak, ni raro. Solo mi manera de percibir las cosas es diferente y también la de procesar la información. Y por eso puedo parecer diferente, pero soy un niño cualquiera. La verdad, es que soy un niño como cualquier otro, con sueños, ilusiones y solo quiero que me conozcan, me entiendan y me ayuden a encajar en la comunidad”, es el mensaje contundente que nos dice Federico.

Y es que quienes padecen síndrome de Asperger, han llegado a ser discriminados, como el caso que comentábamos hace unos meses de un niño que padecía Asperger y al cual cambiaron de grupo por quejas de otros padres, para posteriormente las madres de los otros compañeros de clase celebraran por WhatsApp ese cambio de grupo.

A continuación, Federico explica algunas cosas que él percibe diferentes a los demás debido al síndrome de Asperger:

Nuestros sentidos son más agudos, por eso algunos ruidos yo los siento insoportables, no puedo estar donde haya muchas luces, no puedo comer algunas cosas o alguna ropa no la soporto. Yo escucho todos los ruidos al mismo tiempo, como las chicharras, la vecina hablando, mi hermana hablando, los truenos, todo. Por eso a veces me quedo en shock. Y por eso yo me siento sobre cargado. Todo lo que pasa por mis sentidos lo siento 120 veces aumentado.

Las imágenes me llegan como muchos flash, por eso no puedo mirar bien a los ojos. El tacto, se me siente como si estuviera usando 20 prendas al mismo tiempo. El gusto… no puedo soportar el sabor de algunas cosas que están muy frías o muy calientes. Y el olfato es más agudo de lo normal.

Me cuesta entender las emociones de los demás y las mías también. Si quieres que sepa algo, dímelo con tus palabras, no entiendo muy bien el lenguaje no verbal. Mi pensamiento es rígido, así que me enojo cuando las cosas cambian o cuando no me salen como yo quiero.

Federico continúa contando que solo le gustan ciertas cosas y temas, y eso se ha vuelto un problema porque a él le gusta hablar de eso todo el tiempo y a otros niños no les gusta. Pone como ejemplo que a la mayoría de los niños les gusta el fútbol, pero él no es muy bueno en los deportes debido a sus capacidades motoras, y por esto mismo tiene problemas al escribir.

Él concluye su testimonio contando que le cuesta trabajo mantener la atención y tiene dificultad para organizar sus pensamientos para hacer algo, lo que lo hace ser distraído y desordenado. Pero en general, le encanta tener amigos y se considera un niño feliz.

Un síndrome que debemos comprender

Para quienes no tienen ningún Trastorno del Espectro Autista, quizás sea muy difícil entender cómo o por qué actúan de cierta manera quienes sí lo padecen. Y es que no sólo se trata de entender cómo o por qué funcionan diferente a nosotros, sino de ser comprensivos.

Los niños que padecen algún TEA pueden sufrir discriminación, rechazo o malos tratos en general, de parte de aquellas personas que no comprenden por qué actúan o se comportan de cierta manera. Por eso es bueno que existan testimonios como el de Federico, que ayudan a que podamos conocer un poco más acerca de lo que ellos sienten y nos ayuden a ser más empáticos.

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